LA IMPORTANCIA DE LA DIVERSIDAD E INCLUSIÓN EN LAS ORGANIZACIONES.
Diversidad e inclusión son dos palabras cada vez más presentes en la Sociedad y que por tanto también deberían serlo en las Empresas.
Cuando hablamos de diversidad nos referimos no solo a orientación sexual o identidad de género sino también a nacionalidad, religión, ideología, edad, formación académica, composición familiar y diversidad funcional.
Una empresa diversa es aquella que fomenta la inclusión de diferentes perfiles en sus equipos. La diversidad o falta de homogeneidad es una característica que proporciona una gran riqueza a las organizaciones ya que permite que éstas tengan una mayor capacidad de adaptación a las circunstancias socioeconómicas cambiantes en las que nos movemos. También permite un mayor bienestar de las personas, que sienten que encajan en un equipo y que su voz es escuchada y valorada a pesar de las diferencias.
La inclusión de perfiles diversos favorece el intercambio de ideas e impulsa la generación de propuestas y soluciones diferentes. Propicia la creatividad e innovación.
Según estudios publicados (Global Diversity and Inclusion: Fostering Innovation Through a Diverse WorkForce) las empresas cuyos ingresos superaban los 10 mil millones de dólares están de acuerdo en que la diversidad ayuda a potenciar la innovación.
Por el contrario, las organizaciones que no son capaces de ver la riqueza que implica la inclusión de individuos diversos dentro de los equipos no será capaz de ver los problemas desde diferentes perspectivas y por lo tanto tomar las mejores soluciones.
Por otra parte, implantar políticas de inclusión reales dentro de las organizaciones hace que estas sean mejor vistas por los trabajadores y permite una mayor atracción de talento. Cada vez son más las personas que investigan si los empleadores tienen estas políticas y deciden incorporarse a una empresa u otra en función de las mismas. Esto es más acusado si los profesionales pertenecen a la generación de millennias, considerada la fuerza laboral más diversa de la historia. Para estas personas, encontrar un lugar de trabajo diverso e inclusivo supone poder desarrollarse profesional y personalmente en un ambiente acogedor abierto a escuchar ideas diferentes y donde los profesionales disponen de una mayor autonomía a la hora de crecer y emprender dentro de la propia empresa.
Conocidos ya los beneficios de la diversidad e inclusión surge la pregunta, ¿qué pueden hacer las organizaciones para ser más diversas?
A continuación enumero algunas de las soluciones:
- Garantizar un proceso de inclusión inclusivo y riguroso con el que se elijan a los profesionales más adecuados teniendo en cuenta su formación, aptitudes, cualidades personales y el encaje de estas dentro de la cultura de la empresa.
- Incluir programas de inclusión de colectivos vulnerables.
- Promover la igualdad retributiva y de género.
Pero sin duda es necesario un compromiso real por parte de las organizaciones que valore y permita el cambio y sea capaz de implementar una estrategia de diversidad efectiva.
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