Formación y acompañamiento dentro de las organizaciones como motor de la innovación y emprendimiento intra-empresarial.
Un intra-emprendedor puede definirse como aquella persona que trabaja dentro de una organización realizando sus tareas habituales y además contribuyendo al desarrollo de la organización generando nuevas ideas, propuestas e iniciativas dentro de la misma que aportan un valor añadido.
Suelen ser personas creativas, con visión de negocio y audaces pero al mismo tiempo con un elevado grado de compromiso con la empresa. Comparten valores con la organización en la que están integrados y habitualmente además ejercen una gran labor de liderazgo y motivación para el resto de miembros de la organización.
¿Qué características debe tener una organización para favorecer el emprendimiento intra-empresarial?
Hay tres elementos indispensables que permiten en desarrollo de esta actitud innovadora e intraemprendedora de los miembros de una organización:
- En primer lugar, podemos mencionar a los propios individuos que forman parte de los equipos y hacen posible ese emprendimiento interno. Individuos como he mencionado antes que comparten la visión y valores de la empresa, tienen un espíritu innovador. Son aquellos que se cuestionan los procesos instaurados, la manera de hacer las cosas, la cadena de valor y relaciones con clientes buscando siempre la forma de mejorar con ideas alternativas y creativas. Suelen además buscar nuevas alianzas estratégicas para alcanzar los objetivos de la organización.
Además, estas personas suelen tener habilidades internas que les permiten manejar constructivamente los conflictos, tienen una actitud positiva y tienen rápida capacidad de adaptación a los cambios. - El segundo elemento importante para este caldo de cultivo de la innovación e intra-empredimiento es la propia cultura de empresa. Es necesario que en esta cultura se apueste por la evolución constante y reinvención de los productos, servicios y procesos. Son empresas que no les cuesta aceptar los errores como parte del progreso por lo que invitan a sus miembros a generar ideas e innovar. El empoderamiento es también otra seña de identidad de la cultura de una organización.
- El último elemento viene dado por las características, habilidades y tipo de liderazgo ejercido por los directivos de la compañía. Es necesario que la organización cuente con líderes comprometidos con los resultados de la empresa pero que también sean capaces de establecer una fuerte conexión con y entre sus equipos. Personas con exigencia elevada pero orientada a la excelencia, motivadores y que sean capaz de detectar el talento de sus empleados y potenciarlo. Trabajadores incansables, con alta energía, generosidad y ejemplo son claves de su éxito.
Hay organizaciones en las que estas características se dan de forma natural desde los inicios pero hay otras en la que es necesario establecer programas formativos y de coaching que favorezcan la transición y cambio de cultura de empresa hacia otras más innovadoras y adaptadas a los nuevos tiempos.
¿Crees que estos cambios son posibles? ¿Identificas alguno de estos elementos en tu organización? ¿Crees que la formación juega un papel fundamental en ello?
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